Villa Maria Tadini
2 dormitorios
4 huéspedes
2 baños
Mascotas: No
Tu estancia en Villa Maria Tadini
Kaštelir es un pintoresco pueblo de Istria situado en una colina, rodeado de naturaleza virgen y hermosos viñedos. Esta pequeña ciudad rezuma el encanto de la arquitectura tradicional de Istria con casas de piedra y calles estrechas. Se encuentra a pocos kilómetros del mar Adriático, lo que lo convierte en un destino ideal para quienes quieran explorar la costa y disfrutar de los beneficios de las playas. Además, Kaštelir es conocido por su entorno tranquilo y su atmósfera relajante, lo que lo convierte en una excelente opción para unas vacaciones familiares o para escapar del ajetreo y el bullicio de la ciudad. En la propia ciudad podrá encontrar tabernas y restaurantes típicos de Istria que le deleitarán con una rica oferta gastronómica de especialidades locales y los mejores vinos. También hay pequeñas tiendas donde se pueden conseguir alimentos y productos locales frescos. Kaštelir también es conocida por sus hermosos miradores desde donde se puede disfrutar de una vista impresionante de las colinas, olivares y viñedos circundantes. Aquí podrá caminar, andar en bicicleta o simplemente disfrutar de la relajante naturaleza. Si le gustan las vacaciones activas, hay numerosas rutas de senderismo y ciclismo en las inmediaciones, así como oportunidades para realizar diversas actividades acuáticas en las playas cercanas. Una visita a Kaštelir le brindará la oportunidad de sumergirse en el estilo de vida de Istria, experimentar la cultura y la tradición auténticas y relajarse en un entorno tranquilo y natural.
Kaštelir es un pintoresco pueblo de Istria situado en una colina, rodeado de naturaleza virgen y hermosos viñedos. Esta pequeña ciudad rezuma el encanto de la arquitectura tradicional de Istria con casas de piedra y calles estrechas. Se encuentra a pocos kilómetros del mar Adriático, lo que lo convierte en un destino ideal para quienes quieran explorar la costa y disfrutar de los beneficios de las playas. Además, Kaštelir es conocido por su entorno tranquilo y su atmósfera relajante, lo que lo convierte en una excelente opción para unas vacaciones familiares o para escapar del ajetreo y el bullicio de la ciudad. En la propia ciudad podrá encontrar tabernas y restaurantes típicos de Istria que le deleitarán con una rica oferta gastronómica de especialidades locales y los mejores vinos. También hay pequeñas tiendas donde se pueden conseguir alimentos y productos locales frescos. Kaštelir también es conocida por sus hermosos miradores desde donde se puede disfrutar de una vista impresionante de las colinas, olivares y viñedos circundantes. Aquí podrá caminar, andar en bicicleta o simplemente disfrutar de la relajante naturaleza. Si le gustan las vacaciones activas, hay numerosas rutas de senderismo y ciclismo en las inmediaciones, así como oportunidades para realizar diversas actividades acuáticas en las playas cercanas. Una visita a Kaštelir le brindará la oportunidad de sumergirse en el estilo de vida de Istria, experimentar la cultura y la tradición auténticas y relajarse en un entorno tranquilo y natural.
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Reseñas
10
Residencia en 1 reseñas
Wir haben uns als Familie mit fast erwachsenen Kindern (16/19) sehr wohl gefühlt in Tandini mit WLAN. Das Haus ist wunderschön mit viel liebe und geschmackvoll renoviert und wir durften die ersten Mieter sein. Die Ausstattung der Küche ist noch etwas spartanisch und wird sicher im Laufe der Zeit noch ergänzt. Man kann mit 4 Personen durchaus mit dem Geschirr klar kommen, doch zB. etwas mehr Essbesteck wären von Vorteil. Auch die Möglichkeit auf der anderen Seite wo die Mülleimer in der Küche platziert sind, würde ich noch als Arbeitsbereich mit einem weitern Küchenschrank ausbauen. Es ist etwas schwierig etwas für das Essen zu schneiden, da wenig Arbeitsfläche auf det Seite der Spühle und Kochstelle ist Dies soll überhaupt kein Makel darstellen, doch ein Hinweis, dass es so nicht ganz obtimal ist wollten wir dazu schon abgeben. Der Besitzer Antonio ist sehr freundlich und hat sich rührend um alles gekümmert obwohl er nicht im Ort gewohnt hat. Man hat absolute Privatsphäre. Der Pool ist sehr ansprechend und mit 1.5m tief optimal. Der Ort Tandini ist sehr ländlich und ruhig. Man bekommt von den Anwohnern fast nichts mit und so haben auch wir uns auf diesem schönen Anwesen verhalten-ruhig. Dadurch hatten wir gleich im Nachbarhaus gute Gelegenheiten um regionales Gemüse (Tomaten, Gurken, Zwiebeln...) zu kaufen. Ein sehr freundlicher Weinbauer mit Deutschkenntnissen gleich um die Ecke sorgt für landesübliche Abwechslung im Weinglas am Abend. Die Leute sind alle sehr freundlich und wir haben uns sehr wohl in der Villa Maria gefühlt. Wir kommen gerne wieder.